Tras tres temporadas en Nervión, otro de los ejes fundamentales del equipo, como Diego Carlos, marcha del Sevilla F.C. y ese no es otro que el codiciado Jules Koundé. El francés que ya sonó el verano pasado para abandonar el club hacía Londres, en concreto el Chelsea, que mostró mucho interés en él, ha terminado recalando en el F.C. Barcelona por una cantidad cercana a los 65M de euros que exigía el Sevilla para venderlo, concretamente y según algunos medios, 50M fijos + 10M en variables. Tras esto, ¿que supone la venta del central, para el Sevilla? ¿Cuál ha sido su rendimiento y crecimiento durante su estancia en el Sánchez Pizjuan?
Ya es oficial, el culebrón con cuatro aristas Sevilla FC, Koundé, Chelsea y F.C. Barcelona, ya ha acabado y con el parisino ya como nuevo jugador "blaugrana", tras haber sido satisfechas las pretensiones del club hispalense. Tras la salida de Diego Carlos, este era uno de los movimientos dentro del seno nervionense más claros, una cantidad mínima por Koundé y a partir de ahí empezar a hablar. Primero fue una oferta formal de unos 55 millones de euros por parte del Chelsea, la cual fue rechazada por la dirección deportiva encabezada por Monchi, por insuficiente. Tras esto, se intensificaron las negociaciones y ya varios medios anunciaban en las últimas semanas, que el Sevilla y el Chelsea estaban cerca de cerrar un acuerdo por la cantidad citada anteriormente pero en ningún momento se llegó a materializar. Tras la partida de Jules Koundé con el equipo hacía Lagos y la inoperancia de los "blues", en Barcelona, consideraron este gesto, como el definitivo para empezar su ofensiva, la cual tras las últimas negociaciones y la incredulidad de todo el mundo del fútbol, han terminado con el francés en el Camp Nou.
Y, ¿qué supone para la entidad la venta de Koundé este verano? Con las cuentas cuadradas tras la salida de Diego Carlos al Aston Villa, esta segunda venta, sirve para empezar a activar operaciones en el apartado de fichajes que estaban a la espera de luz verde para poder ser ejecutadas. Supone una plusvalía de 55 millones de euros (25 millones del coste del fichaje divididos por 5 años de contrato, quedarían por amortizar 10 millones), lo que, sin conocer de forma oficial las cantidades fijas y variables, permite a Monchi reforzar al equipo sin necesidad de más ventas (muy pocas veces un mercado de fichajes con el gaditano al mando han superado esas cifras), por causas económicas y con toda la tranquilidad de quien se sabe el mejor conocedor del mercado de fichajes. Uno de los primeros movimientos podría ser el de Isco, muy cerca de cerrarse tras el "stage" en Corea del Sur o incluso la cesión de Sergio Reguilón.
Hay que hablar entonces de su trayectoria como puntal fundamental del Sevilla de Julen Lopetegui desde los inicios del proyecto y de uno de los mejores centrales de La Liga y Europa, la evolución que ha sufrido desde la joya que ya se destacaba en el Girondins de Burdeos hasta el central consagrado que ha fichado el "Barça".
Para analizarlo, vamos a comparar al Jules Koundé de la temporada 2019 - 2020, su última temporada en la Ligue 1 de la mano del Girondins y la pasada temporada, que por estadísticas y sensaciones es su mejor temporada en el conjunto de Nervión (esta temporada ha estado muy condicionada, por lesiones y el nivel general del equipo, así que no es una muestra exacta para poder probar su evolución). Las agruparemos en dos facetas, sin y con balón (para resumirlo):
- Sin balón: Sin duda en la faceta que más ha mejorado, es en las presiones exitosas, (el resto de estadísticas muestran números similares, aunque el valor es mayor siendo La Liga una competición de, bajo mi punto de vista, mayor dificultad) mientras que en la Ligue 1 promediaba 2'86 por partido, la temporada pasada en La Liga, llegó a promediar 3'33, es decir un aumento del 10'7% (34'8% por 45'5%), además sus números en cuanto a intercepciones más tackles en Ligue 1 eran muchos más altos (2'54 por partido) que en La Liga donde han disminuido (2'21 por partido), con que si conjugamos las dos estadísticas, vemos como el francés ha mejorado mucho en su capacidad de robar el balón, sin necesidad de usar acciones técnicas como las ya mencionadas, sino más de corte posicional (cerrar líneas de pase, acelerar la acción del jugador, dirigirle hacia determinadas zonas, forzar pases descontrolados, o hacer que el jugador en posesión se quite el balón de encima). (Datos extraidos de FBREF desarrollados por Stats Bomb).
- Con balón: En este aspecto ha sido en el que ha mostrado todo su potencial, en las diversas estadísticas de pase, tipos de pases, creación de goles y tiros y en posesión de balón ha destacado por encima de la media, por ello voy a exponer solo un par de las estadísticas más significativas. Lideró estadísticas en todo a nivel de pases comparados con el resto de centrales de La Liga, pases completados por partido, pases cortos, pases medios, pases largos, pases en el último tercio del campo, pases al área rival y pases progresivos. Llama mucho la atención sobre todo su gran mejoría en pases bajo presión, estando en una liga de un nivel mayor, de 6'54 completados por partido en Ligue 1, a hacer 7 completados por partido en La Liga, siendo percentil 93 comparado con el resto de centrales. Por último en posesión de balón, mejor tanto en su presencia en el centro del campo (31'5 toques de balón por partido en Ligue 1 por 42'14 en La Liga) y en ataque donde la maximización de su presencia en esta zona es aún más llamativa (2'30 toques de balón por partido en Ligue 1 por 7'05 en La Liga), lo que da a entender la de veces que ha hecho progresar al equipo con sus arrancadas y conducciones generando superioridades, ganando confianza y arriesgando aún más en estas acciones con el Sevilla. (Datos extraidos de FBREF desarrollados por Stats Bomb).
Por ello, si lo observamos en un cómputo global, vemos como la estancia de Koundé ha sido fructífera en todos los sentidos, tanto en el rendimiento deportivo como económico, progresando año a año en sus cualidades futbolísticas y convirtiéndose en un jugador de élite, además de ser una de las principales razones, junto a Bono, Diego Carlos y Fernando por las cuales el Sevilla se ha clasificado tres veces consecutivas para la Champions, además de convertirse inmediatamente en la venta más cara de la historia del Sevilla y permitiendo así reforzarse de manera solvente a la entidad hispalense en este mercado estival de fichajes.