El cancerbero del Sevilla FC fue el que más atajó en la primera jornada de la UEFA Champions League
Imagen: ABC de Sevilla
Durante la última edición de la UEFA Europa League en la que el Sevilla FC salió campeón el pasado verano de 2020 en Colonia, Yassine Bono se hizo con la titularidad bajo palos en la fase post-covid de la competición tras la lesión del checo, Tomás Vaclik, convirtiéndose así el marroquí, sorprendentemente, en uno de los más destacados de la conquista de la sexta.
Desde aquel entonces, el ex del Girona se ganó la confianza de su técnico, Julen Lopetegui, y es actualmente, el guardián de la portería de Nervión. En el choque del pasado martes ante el Red Bull Salzburgo en la fase inaugural de la UEFA Champions League, el arquero sevillista fue el que más balones atajó durante la primera jornada de la máxima competición continental, con hasta 7 paradas.
El encuentro se le puso cuesta arriba al combinado del Ramón Sánchez Pizjuán desde el primer momento con hasta 3 penaltis en contra en la primera mitad. Sin embargo, el marroquí fue el encargado de salvar a su equipo, que se encontraba con uno menos desde el minuto 50, con paradas como la que le hizo a Benjamin Sesko a boca de gol, demostrando una vez más su gran capacidad de reacción.