El club hispalense sigue demostrando que el Sánchez Pizjuán es un campo que siempre pone las cosas difíciles y continúa invicto en esta campaña
El Sevilla viene acostumbrando en las últimas campañas a mostrar una gran fortaleza siempre que juega en Nervión. El club andaluz es conocido por la dureza que muestra en su feudo y la complejidad que le plantea al rival si este desea llevarse algún punto.
La presente temporada es el más claro ejemplo de la afirmación. En la 2021/22, el conjunto dirigido por Julen Lopetegui aún no ha perdido en LaLiga Santander siempre que ha jugado en el Sánchez Pizjuán. Un registro de ocho victorias y tan sólo dos empates, ante Barcelona y Alavés. En total, el Sevilla ha encajado 8 goles como local, siendo el plantel menos goleado del campeonato doméstico con 13 tantos.
A estas alturas de LaLiga en la 2020/21, con diez partidos jugados en casa por parte del Sevilla, los de Lopetegui habían perdido en dos ocasiones y llevaban encajados un total de siete goles. Sin duda, se aprecia una gran mejoría en un equipo que concede un menor número de ocasiones al rival y que regala menos puntos.
Una de los grandes culpables de que el Sevilla muestre un gran rendimiento en casa es la afición. Los sevillistas son un gran apoyo para los jugadores cuando estos necesitan de aliento para sacar el encuentro adelante. En numerosas ocasiones, tanto técnico como futbolistas han reconocido el gran papel que tienen los aficionados cuando el partido se atasca.