Muchísima tensión y muchísimos nervios a la finalización del encuentro en los alrededores del Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán, donde se vivieron momentos de represalias de la afición con ambos personajes alrededor
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El desmarque |
Ignacio Navarro y Alberto Pérez-Solano han sido protegidos por la seguridad tras querer abandonar el Sánchez-Pizjuán y tenerse que refugiar en el coliseo nervionense tras las represalias que ha tenido la afición ante ellos, en los que han tenido que acudir las fuerzas de seguridad para apartarlos de ambos personajes.
Pérez-Solano, el abogado sevillista y señalado como "bético", tuvo que ser protegido por los miembros de seguridad del estadio ante la amenaza de los allí presentes, e Ignacio Navarro, el psicólogo, tuvo que entrar al Sánchez-Pizjuán a la carrera y protegido tanto por los miembros de seguridad privados del club como por la propia Policía.
Momentos dantescos que se están viviendo entre la afición sevillista, totalmente indignada con la actual situación provocada por la gestión del actual Consejo de Administración.