El Sevilla FC viaja hasta San Sebastián en busca de su primera victoria liguera en la etapa de Diego Alonso.
Poco más de un mes se cumple de la llegada del uruguayo al banquillo sevillista, desde entonces, el Sevilla no ha conseguido los tres puntos en la competición doméstica. 4 partidos y 4 empates son los números que registra el de Montevideo en La Liga EA Sports. Números muy precarios para los objetivos que los hispalenses se marcaron al inicio de temporada pues de no cambiar la dinámica muy complicado resultará alcanzarlos a final de temporada.
En lo que al partido del domingo repercute encontramos a dos equipos que llegan en dinámicas muy distintas Uno ocupando la parte alta de la clasificación, el otro más cerca de la zona de descenso que de los puestos europeos.
Los vascos están viviendo un auge deportivo constante. Desde que la temporada pasada resultasen ser una de las sensaciones de la liga con su buen fútbol y su posición en la tabla clasificatoria, hasta este año donde están reafirmando el buen trabajo de la campaña pasada con actuaciones estelares en la máxima competición continental y con una buena posición en la liga española. En sus últimos cinco partidos ligueros registran tres victorias, una derrota y un empate. Sin embargo, la última derrota de la Real tiene, como fecha el 4 de noviembre y lugar el Reale Arena, ante un Barça que consiguió sacar los tres puntos a la heroica, es decir, el último precedente de los vascos en casa se saldó con derrota.
En cuanto a los sevillistas, llega a San Sebastián un equipo que necesita sumar de tres en tres cuanto antes. Tan solo doce han sido capaces de obtener los hispalenses hasta la fecha cosechando un gran número de empates a lo largo de estas doce jornadas. El último precedente en esta competición se saldó con un empate ante el Real Betis Balompié donde los sevillistas, pese a jugar en casa, tuvieron que remar a contra corriente durante algunos minutos del encuentro. Sin conocer la victoria desde septiembre, el Sevilla FC tratará de reencontrarse con la victoria en uno de los estadios más complicados del fútbol español