El francés reconoció que en 2017 no era el momento adecuado para abandonar la disciplina sevillista rumbo a Marsella
En el verano del año 2015, el central galo aterrizó en Nervión procedente del AC Milán por un valor aproximado de 2,5 millones de euros.
Desde su llegada, Adil Rami ocupó uno de los puestos en el eje de la zaga del Sevilla FC, que por aquel entonces dirigía Unai Emery, el actual técnico del Villarreal CF. Con la elástica sevillista, el francés consiguió una UEFA Europa League, en la que el conjunto hispalense venció en la final por 3 goles a 1 al Liverpool en Basilea.
Sin embargo, en el verano del año 2017, el futbolista natural de Bastia abandonó la disciplina del combinado blanquirrojo para poner rumbo a Marsella por una cantidad en torno a los 6 millones de euros, una revalorización desde que llegó de algo más de unos 3 millones de euros.
En una entrevista para L'Equipe, el campeón del mundo con Francia reconoció: "Me hubiera quedado en Sevilla. No me arrepiento de haber jugado en el Marsella, es uno de mis mayores motivos de orgullo, pero tal vez no era el momento adecuado".
Respecto su marcha a Marsella, Adil Rami confesó: "Salió mal porque había un presidente que no era profesional y un entrenador que era Rudi García con el que ya había jugado". A sus 36 años, tras pasar por varias ligas europeas, el francés ha vuelto a la Ligue 1, esta vez al Troyes. Sobre su momento actual aseguró: "Volví por mis hijos. Están en París y los veo tanto como puedo. Tienen cinco años, juegan al fútbol y son fans de Kylian Mbappé. Necesitaba que vieran a su padre en la Ligue 1".