Las autoridades brasileñas suspendieron el partido a los 5 minutos de comenzar
Imagen: Reuters
Esta pasada tarde-noche, tanto Brasil como Argentina se volvían a ver las caras por primera vez después de la última final que disputaron este mismo verano por la Copa América, que finalmente, la terminó alzando la albiceleste. Sin embargo, aunque el partido fuese de preparación para el próximo mundial de Qatar 2022, la 'Canarinha' tenía ganas de revancha.
Una vez arrancado el encuentro y con la pelota en juego, en torno al minuto 5, saltaron varios miembros del comité de sanidad del país brasileño al verde con el fin de suspender el choque entre ambas selecciones, ya que hasta 4 futbolistas argentinos que procedían de Inglaterra (Emiliano Martínez, Buendía, Lo Celso y Romero) no habían cumplido la cuarentena obligatoria, incumpliendo de esta manera, las leyes impuestas por la nación de Brasil.
El ambiente entre ambas selecciones se enfureció y la temperatura aumentaba por momentos, tanto que hasta varios futbolistas de Argentina empujaron a las fuerzas del orden brasileñas. Posteriormente, con un poco más de tranquilidad, los jugadores de la albiceleste, entre los que se encontraban Papu Gómez, Acuña y Montiel, encarrilaron el camino hacia el túnel de vestuarios, y tanto el colegiado, como el comité de sanidad de Brasil, dieron el partido por suspendido.
Leo Messi, el capitán argentino, volvió al césped unos minutos después de la tangana para dialogar con algunos de los futbolistas de la selección brasileña, a los que les confesaba: "Hace tres días que estamos acá. Esperaron a que empezara el partido ¿por qué no avisaron antes, por qué no fueron al hotel?".