Una semana después de volver a la senda de la victoria en Leganés, llega el momento de encarar el tramo final de temporada.
Tras volver a encontrar esas sensaciones positivas que parecían perdidas, llega la hora de afrontar el tramo más importante de la temporada con mayor seguridad. Con la pérdida de la tercera plaza, había llegado la primera crisis desde que se reanudó el campeonato. Y no sólo en puntos, sino en sensaciones. Recuperar el estado de forma se antojaba vital para afrontar el tramo final con garantías, y parece que se ha conseguido. Ahora queda lo más complicado, mantenerlo hasta el final.
Tras un partido resuelto sin mayores complicaciones, el triunfo conseguido ante el Leganés supuso un pasito más en la carrera por disputar la máxima competición continental. Era la oportunidad idónea para descolgarse del resto de perseguidores, pues los rivales cada vez aprietan más.
Por su parte, el gran rival por la tercera plaza, el Atlético de Madrid, está aprovechando la ocasión para aumentar la ventaja respecto a los que ahora son sus perseguidores. Tras la victoria ante Valladolid, que supondría la pérdida por primera vez de dicho tercer puesto, llegarían tres nuevas victorias consecutivas ante Levante, Alavés y Mallorca. Victorias por que permiten a los colchoneros seguir alejándose en racha de tres en tres, y que invitan a mirar la tabla más hacia abajo que hacia arriba.
En el ecuador de esta batería de partidos, destaca un Villarreal que parecía descolgado este año de la pelea por las plazas europeas, pero que tras ganar varios partidos seguidos se ha reenganchado. Tras la escalada en la clasificación, los amarillos se encuentran enrachados, y al término de la anterior jornada se colocaron quintos en la tabla, a tan sólo tres puntos del que es por el momento el cuarto clasificado.
Se unen en esta lucha otros como Gefate o Real Sociedad, aunque los txuriurdines no se encuentran en su mejor momento de forma, pero la corta diferencia de puntos hace imposible confiarse.
Por su parte, la SD Eibar se presenta este martes con la necesidad de seguir luchando por la permanencia. A seis puntos del descenso, la salvación se antoja más que probable para ellos a estas alturas, pero aún así los vascos no querrán verse en apuros innecesarios de última hora.
A pesar de esta ventaja en la clasificación, vendrán con la necesidad de ganar porque así de cambiante es el fútbol, donde en un visto y no visto, una racha de varios partidos seguidos te pueden cambiar el rumbo de una temporada tanto para bien como para mal.
El último partido clave para ellos, ante el Osasuna, caería del lado rojillo de forma clara. Un partido que hubiera supuesto, en caso de ganar, dejar la salvación casi asegurada. No fue así, pues un doblete de Ruben García otorgó una valiosa victoria para los de Pamplona en su visita a Ipirúa, certificando así su salvación matemáticamente.
Será un partido bastante especial para el uruguayo Sebastián Cristóforo. El volante, campeón de la Europa League a las órdenes de Unai Emery, se enfrentará de nuevo a su antiguo club tras haber pasado por las filas del Getafe, entre otros.
El último precedente entre ambos deja un recordado mitin en Ipurúa. Un encuentro muy claro, que se marchó al descanso con victoria visitante por dos goles a cero (y pudieron ser más), pero terminó con un equipo entregado, que en sólo diez minutos fatídicos se dejó remontar y encajaría tres goles. Quedó demostrado que, cuando se juega al filo del alambre, a veces sale cara y otras veces sale cruz. Una afirmación que este día se vio probada.
Durante estas semanas, Lopetegui está dosificando la plantilla, como es lógico dada la carga de partidos. Pero esto ha dejado a la vista la diferencia abismal entre algunos miembros de la misma. El equilibrio en el rendimiento de los futbolistas es crucial para mantener enganchados a teóricos titulares y suplentes, y más aún en un momento dónde es necesaria la presencia de todos, dada la carga física. Pero hay algunos que ni están, ni se le esperan. A años luz de alcanzar la dinámica del equipo.
El técnico volverá a contar con Franco Vázquez, que tras cumplir ciclo de amarillas se perdió el partido del pasado martes en Leganés. El propio Lopetegui, también volverá al banquillo tras ver el partido en Butarque desde la grada, al cumplir a su vez sanción por acumulación de tarjetas amarillas.
La mala noticia se encuentra en el eje de la zaga. Jules Koundé se perderá el partido por sanción, rompiendo así una de las parejas de centrales más fiable de todo el campeonato. Sergi Gómez tendrá una nueva oportunidad de demostrar su valía acompañando al brasileño Diego Carlos.
El bloque creado por Monchi ha dejado sus luces y sus sombras. A grandes rendimientos, se unen grandes fracasos. Lejos de ser una plantilla amplia, no hay un nivel parejo entre unos y otros, transformándose el equipo en uno totalmente diferente en función de quién juegue. Los días de más en esta semana de "descanso" habrán servido para recuperar fuerzas e intentar recuperar alguna que otra causa perdida.
Tras las buenas sensaciones que dejó Óliver Torres en Leganés, no hay que descartar que el extremeño vuelva a coger la camiseta de titular en detrimento de un Banega cuyos mejores partidos ya hemos visto.
La duda está en la delantera, donde Luuk de Jong y En-Nesyri, que fue de la partida, se repartieron minutos el último partido. El bajo rendimiento del marroquí y la poca fortuna de cara al gol hace más que probable la vuelta del holandés a la titularidad.
Conseguir una regularidad en puntos y juego se antoja vital para despegarse de unos perseguidores que siguen apretando, y así encarar el tramo final de temporada con mayor tranquilidad.
En el tramo clave de la temporada, la exigencia no deja lugar a equivocaciones. La pérdida de una tercera plaza que cada vez se aleja más, servirá de estímulo para intentar volver a ese sitio tantas veces ocupado a lo largo del campeonato.
Es el momento de encarar el tramo más importante con las mayores garantías posibles. Después de volver a sentir esa inercia positiva, llega la hora no soltarla para no pasar apuros en el recorrido final. Pensarlo resulta fácil, pero engancharse a ella, la tarea más complicada.
Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán | Lunes, 6 de julio de 2020 | 22.00 h.