Los de Jesús Galván ganan en la mínima ante un Atlético de Madrid que ha afrontado la mayoría de la segunda mitad con uno menos.
Una primera parte marcada por la intensidad de ambos conjuntos
El partido empezó de forma muy intensa dónde las posesiones duraban poco tiempo pero los de Jesús Galván se mostraban más finos en la salida de balón. Los colchoneros aceleraron y empezaron a tener acercamientos al área rival. En el minuto 25´ Alberto Flores haría de las suyas y pararía un mano a mano ante Janneh.
El primer cambio tuvo que ser de los locales debido a la lesión de Alexandro y entró al campo Oso. Hormigo sería el protagonista de una acción con mucho peligro pero que no pudo adelantar a los suyos en el marcador.
El arquero visitante no se quedaría atrás ya que apareció para impedir el tanto de Antonetti con una gran parada. Nuevamente Alberto Flores bloquearía otra oportunidad de gol para Janneh, demostrando una vez más el nivel que tiene el portero sevillista.
Los últimos minutos del encuentro aparecerían para brindarnos la última oportunidad del conjunto visitante, siendo de un remate de cabeza de Martín que terminaría en el larguero. Tras unos instantes tensos, se acabaría la primera parte del encuentro con el mismo resultado del inicio.
Una segunda mitad muy sufrida para todos
El encuentro arrancaría con dominio sevillisra pero sin poder acercarse a la portería de Iturbe, Darío tendría en el 55´ una oportunidad de oro para adelantar a los suyos pero Iturbe actuó perfectamente. El Atlético de Madrid se despertaría y se acercaría a la portería de Alberto Flores pero sin causar mucho peligro.
El equipo local movería el banquillo para buscar aire fresco y abrir la lata en el marcador. El equipo visitante se quedaría con uno menos con la expulsión de Sedu Diallo por doble amarilla. Tras dicha expulsión, el partido se calmaría un poco y las ocasiones disminuían.
Fernando Torres movería el banquillo para buscar alguna oportunidad con la que adelantarse en el marcador. Entrarían los últimos instantes del encuentro y ninguno de los dos equipos conseguía ese ansiado gol con el que podía dar los tres puntos. El descuento sería de 6 minutos, instantes dónde el partido se pondría más tenso, los sevillistas apretarían pero no había forma. Finalmente, los locales conseguirían el premio de meter ese tanto que significaría todo en este partido.