Opinión: "El paradón de Palop a Viduka" por Sergio Álvarez

Cualquier sevillista que se precie, pensando en la derrota de ayer ante el Bayern München en la Supercopa de Europa, le viene cierto sentimiento de frustración, no solo por el resultado, si no porque además de todo lo luchado, también tuvimos esa ocasión que hubiera decantado la balanza a favor de la plantilla hispalense.


Desgraciadamente el balón no entró, pero no es solo fallo del delantero, también es acierto de un portero (Manuel Neuer) que se hizo grande. Igual que en el día 'D', Bounou hizo lo mismo con Lukaku o Martial. No por ello, tras lo ocurrido, hay que darle la puntilla. En vez de ver el vaso medio vacío, hay que intentar verlo medio lleno. ¿Dónde está la parte positiva? En que la tuvo. Y las tiene en cada partido.

Obviamente el primero que se fue mal, tal como muestran las imágenes,  fue él. Además, el que haya jugado al fútbol sabe lo dificil definir con brillantez tras recorrerse todo el terreno de juego. Si después de la carrera, consigue marcar, a lo mejor es que estamos hablando de uno de los mejores delanteros del mundo. 

Todos jugando a la consola somos buenísimos y un mano a mano es imposible que la fallemos. Resulta que esto es la vida real, y que tras un esfuerzo descomunal, más de 70 metros a esprint, se encuentra con un portero que despeja el balón muy bien. El mismo que saca Palop a Viduka en Eindhoven.