Sevilla FC, sinónimo de estabilidad

Pasan los años y la corporación hispalense sigue cada temporada volviendo a jugar por el continente europeo. Una solidez que muy pocos conjuntos españoles pueden jactarse


No es algo que sea seguro, pero normalmente un título conlleva a una buena temporada. Es el caso de el Sevilla de Lopetegui el cual ha relizado una temporada que en cuanto a estadísticas se refiere, es más que brillante: con el récord, aún vigente, de partidos invictos (21), con 70 puntos conseguidos (la segunda mayor cifra de la historia del club) o que este primer equipo sevillista, es el que menos tantos ha encajado en Liga en una temporada en el S.XXI (35).  

Con estos gaurismos cabe preguntarse si esta es la mejor temporada de la historia del club. Evidentemente a todos se les viene la imagen a la cabeza de la temporada 2006/2007, donde hasta la última jornada se peleó por La Liga (71 puntos), se ganó la Copa de la UEFA en Glasgow y la Copa del Rey frente al Getafe (1-0). 

De una manera o de otra, el Sevilla ya lleva muchos años en un nivel regular, donde la afición puede considerar que ha sido un buen o mal año, pero (casi) siempre ha terminado como mínimo en séptimo lugar. Una estabilidad que pocos equipos, considerados rivales directos, pueden presumir: el caso del Villarreal que durante estos años llegó a descender a Segunda División. El Valencia, el cual se halla en una grave crisis económica e institucional, y que dos-tres temporadas ha acabado en puestos de la zona media-baja de la clasificación. 

Viendo la trayectoria de clubes parejos a la corporación hispalense, hacen ver aún más loable lo regular que ha sido la entidad en cuanto a consecución de objetivos, pudiendo no entrar todos los años en Champions, sí, es cierto, pero teniendo claro de que seguramente el año que viene se jugaría entre semana.